Quiero entregarte algunos tips súper simples y básicos para que puedas mantener su casa en orden. He conversado con muchas personas que me dicen que no saben por dónde empezar a ordenar, que siempre la casa es un caos y que a pesar de que ordenan y ordenan, pareciera ser que dan vueltas en círculos y nunca terminan.
Créeme que yo pasé por eso durante casi toda mi vida en la otra casa y cuando descubrí La Magia del Orden de Marie Kondo hace 3 años, me cambió la vida de forma drástica. Yo ya había estado dándole vueltas a la idea de desapegarme de las cosas materiales, pero necesitaba una guía, alguna forma clara y práctica que me motivara a dar los pasos más largos en vez de estar sólo a pequeñas zancadas y con ese libro y varios otros autores que encontré (libros y videos en Youtube), pude hacerlo.
Como la idea es enseñarte de acuerdo a mi experiencia, es que quiero compartirte los siguientes pasos a seguir para empezar.

Revisa tu velador (o mesita de noche): Aunque sea un espacio pequeño, doy por hecho que adentro de él hay varias cosas que no deberían estar ahí, a menos que sean de uso habitual y les hayas dado ese espacio para guardarlos (aunque lo dudo). No siendo adivina, apostaría que podríamos encontrar agujas o alfileres, lápices, tornillos, aros, boletas, monedas, varias pinzas, espejos, coletas para el pelo, papeles con alguna nota, medicamentos, clips, cortauñas, etc. Si bien algunas cosas sí pueden guardarse ahí, muchas de ellas no. Supongo que ya las identificaste. Tómalas y guárdalas donde deberían ir. Las agujas y alfileres en el costurero, los tornillos en la caja de herramientas, las boletas si no sirven se botan y las que sí deberías guardarlas con otras boletas, los medicamentos en el botiquín y así sucesivamente. Tómate unos 10 minutos de tu vida (como máximo te lo aseguro) para reorganizar estas pequeñas cosas y verás tu velador ordenado y con las cosas que realmente necesitas o quieres que estén allí.
Revisa la mesa de arrimo del acceso a la casa (si es que tienes): Haz lo mismo que con el velador. Siempre hay ahí objetos y papeles que o no debieran estar o que quedaron para siempre, pero que no prestan ninguna utilidad.
Si te dejan, haz lo mismo con los veladores de los demás integrantes de la casa o bien pídeles que lo hagan. Hay muchos secretos dentro de los veladores y no todos quieren que se los descubran. Así logran quitar volumen a esos cajones y permiten la entrada de cosas nuevas o bien, tendrás más espacio disponible para encontrar lo que buscan dentro de ellos.
Si no tienes velador o tus veladores no tienen cajones, estoy segura que tienes una caja, un balde, un cajoncito en otro lugar con un potpourri de objetos que debieran ser organizados. Es un primer gran paso para aprender a ser organizado y ordenado. Lo importante es que no pierdas la motivación y que conviertas en un hábito el hecho de saber qué cosas tienes en casa y dónde están.